Truco 1: Ten peor coche que tu vecino
Entre 1995 y 1996, Thomas Stanley y William Danko llevaron a cabo la investigación.
Lo que descubrieron Stanley y Danko es que la mayoría de los millonarios siguen el modelo de Amancio Ortega: beben cerveza o vino, no champagne; lucen relojes de cuarzo y conducen coches sencillos, nada que ver con Ferraris o BMW último modelo. Es más, el estudio concluyó que un nada desdeñable 37% de ellos conduce coches de segunda mano.
Los millonarios, aunque nos sorprenda, son personas que tienen en muy alta estima el dinero que han ganado. Éste es el motivo por el que suelen conducir coches en los que encuentran una buena relación calidad-precio. Además, saben que el valor de un coche se deprecia enormemente en cuanto lo sacas del concesionario, así que como hemos visto, un porcentaje alto de millonarios prefiere comprar coches de segunda mano.
Las personas que conducen coches de lujo o últimos modelos necesitan mostrar su estatus a los demás. Para ellos, mostrar su estatus social es lo más importante, pero esto no suele corresponder con una vida libre y feliz: son esclavos de la imagen.
Los millonarios, no necesitan mostrar a los demás que tenían dinero.
¿Este truco se aplica solo a los coches?
En absoluto, lo puedes aplicar con cualquier artículo (un traje, un reloj, una bicicleta, un ordenador, un collar, etc). La idea es muy sencilla, vivir por debajo de tus posibilidades, en lugar de intentar superar el tren de vida de la gente que te rodea.
Vivir a un nivel de gasto adecuado no solo te permite tener un colchón de seguridad ante cualquier imprevisto sino que además, hace que valores mucho más todo lo que tienes y lo disfrutes al máximo.
Luis Pita
Autor de Ten peor coche que tu vecino
Has escrito el libro que me hubiera gustado escribir a mi (aunque no lo he leído, pero si lo he conocido). Creo que gestionando bien un sueldo (normal) puedes llegar a disfrutar más de la vida que si hubiera 2 sueldos mal administrados. De los que gran parte pueden ser deudas y que no te permiten salirte del guión ni un renglón, o que te mantienen pendiente de qué dia del mes es para poder afrontar los gastos normales del día a día, y si viene un imprevisto te quedas en números rojos, por decirlo finamente.¡Cuanta gente vive así!, me sorprendo mucho.
Felicidades.
esto encantada con lo que escribe este Hombre.